lunes, 18 de enero de 2016

Horror en el Orient Express 8

Saludos a todos.

Retomamos la campaña camino de Belgrado. Otras veces ya he comentado que aunque no sigo la campaña al pie de la letra si que uso muchos datos del argumento original así que los resúmenes de las sesiones contienen Spoilers.

LA CASITA DEL BOSQUE
Los personajes tratan de averiguar el paradero del brazo derecho y la cabeza de El Simulacro para completar la estatua y aunque en Zagreb siguieron una pista falsa, continúan la búsqueda con esfuerzo renovado. Su intención era reunirse con el conservador del museo de Belgrado (un experto en estatuaria Bizantina llamado Milovan Todorovic) en busca de una nueva pista.
Para su sorpresa, unos pocos kilómetros antes de llegar a la capital de Serbia el tren comenzó a detenerse de manera inesperada.  Las primeras informaciones por parte del personal del Orient indicaban que la policía había ordenado una parada preventiva por riesgo de atentado anarquista y que se disponían a abordar el tren y asegurarse de que todo estaba correcto. Sin embargo poco a poco la intranquilidad comenzó a adueñarse de los personajes que intuían peligro. A toda prisa se desplegaron por el tren (hacia el furgón de equipaje, a sus cabinas, al coche-salón...) para finalmente descubrir que los policías que estaban subiendo eran falsos agentes y que se trataba sin duda de Hermanos de la Piel que intentaban capturarles.


A partir de aquí hubo de todo. El caos se apoderó por completo del tren cuando se oyó un primer disparo y el líder de los sectarios lanzó un conjuro de enajenación que afectó a muchos pasajeros y miembros de la tripulación. Algunos  personajes se escondían en los baños, mientras otros salían al exterior y andando por la nieve (o por la parte superior del tren) trataban de llegar al furgón para proteger las piezas de la estatua ya recuperadas. El enfrentamiento principal se produjo en el vagón-restaurante donde un par de investigadores se atrincheraron y con la ayuda de dos gánster italianos (pnj aliados, primos de La Cavollaro) se enzarzaron en un tiroteo en toda regla contra los cultistas.

El resultado del enfrentamiento fue la muerte de un personaje y la del líder de los sectarios: El duque del Esseintens. Obligados por la situación abandonaron el tren allí mismo y usaron los automóviles de sus enemigos para llegar hasta Belgrado antes de que el tren llegara a la ciudad y la policía real entrara en juego.


Sin perder un minuto visitaron a Todorovic en el museo y aunque este no sabía nada a ciencia cierta sobre la existencia de El Simulacro, el conservador llevaba años creando un gran archivo fotográfico tratando de crear un inventario completo de las antigüedades del país (para proteger el Patrimonio Nacional de los saqueos y el contrabando). Gracias al contacto de algunos pjs con el British Museum y con La Sorbona consiguieron el permiso necesario para consultar ese archivo y tras una difícil búsqueda toparon con una vieja fotografía en uno de los cuadernos.

Los investigadores encuentran una vieja fotografía con una anotación. No pueden estar seguros pero la pieza que están viendo podría ser perfectamente el brazo derecho de El Simulacro.

 El resto de la aventura consistió en un viaje en un abarrotado cercanías hasta una de las zonas más rurales de Serbia. El padre Filipovic resultó ser el cura de un pequeño pueblo que en su momento había colaborado con Todorovic en el tema del inventario. Recordaba bien El brazo de la estatua pues tras ser encontrado por un campesino lo había guardado en la iglesia durante un tiempo hasta que, no sabía bien el porqué, la mera presencia de la antigüedad en la capilla había sido causa de enfrentamiento entre los católicos del pueblo y aquellos que seguían las viejas costumbres paganas (como los rituales a "la cabra negra"). En nivel de tensión fue tanto que uno de los campesinos murió a manos de otro y Filipovic optó por confiar la reliquia a la vieja Vrocha, una adivina que vivía en mitad del bosque y que era respetada por toda la gente local.
La visita a la casita del bosque fue un tanto siniestra, extrañas sensaciones en el bosque, amuletos hechos con huesos de animales, enigmáticas adivinaciones... pero la vieja no puso ningún problema a que se llevaran la pieza.

Solo les falta la cabeza!

jueves, 7 de enero de 2016

Horror en el Orient Express 7

Las fiestas, cenas de empresa y demás compromisos han ralentizado un poco el ritmo de la campaña, hecho que nos ha dado la oportunidad de estrenar mi último regalo de cumpleaños: el juego de tablero Mansiones de la Locura (Ya tengo shoggoths y unos cuantos bichos Cthulhoideos más!!) 
El fin de semana pasado si que pudimos reunirnos varios del grupo para jugar la séptima sesión y avanzar en la historia. Se puede decir que prácticamente no hago ningún spoiler pues he sustituido totalmente la parte de Zagreb onírico por un par de ideas adaptadas del suplemento El manicomio y otros relatos

MÁS ALLÁ DE ITALIA
 Recuperadas ya cuatro partes de El simulacro los personajes retomaron el Orient en la frontera con Yugoslavia. Según las pistas de Smith su siguiente parada debería ser Belgrado sin embargo, tras sufrir un intento de robo por parte de un "ladrón de guante blanco", descubrieron un sorprendente anuncio (con un mes de antigüedad) en una publicación de subastas y ventas por catálogo.


¿Era posible que una de las piezas de la codiciada estatua hubiera aparecido y salido a la venta en subasta pública? La pista era tan evidente que aunque Zagreb no era una parada prevista no tuvieron más remedio que desembarcar en la ciudad para indagar sobre el asunto.

La primera parte de la investigación consistió en averiguar  quién era el propietario de esta colección privada (un viejo anticuario muerto por causas naturales) y sobre todo quién había sido el comprador final del lote 3. Para averiguarlo tuvieron que colarse en la vieja mansión Stanislovich, hacer preguntas por el vecindario y contactar con el abogado al cargo de gestionar la herencia del viejo. La información sobre la subasta era confidencial pero tras espiar las conversaciones del abogado descubrieron un nombre, Dr. Freygan, y ese nombre los condujo hasta un manicomio en un pueblo no muy lejos de la capital de Croacia.


 El doctor Freygan resulto ser el director y propietario del hospital psiquiátrico y tras las primeras preguntas en el pueblo y la consulta de los periódicos locales rápidamente se percataron que en el manicomio se estaban realizando extraños experimentos (más raros de lo normal en aquella época, que ya es decir) y que esas prácticas habían provocado la muerte de numerosos enfermos. La cosa había empeorado desde la compra del lote 3 un mes atrás.

Se presentaron en el despacho de Freygan argumentando ser periodistas pero una vez estuvieron solos decidieron poner las cartas sobre la mesa, el grupo quería la cabeza de El simulacro. Para su sorpresa el soberbio doctor accedió a entregarles la reliquia pues les dijo que su interés en la subasta se ceñía únicamente al manuscrito en griego que fue subastado en el mismo lote que la cabeza y que ambos objetos no tenían ninguna relación. La sorpresa aumento mucho más cuando al recibir la cabeza de la estatua descubrieron que no se trataba de una pieza de El simulacro si no de un simple busto de mármol que por ignorancia (o como falsificación) había sido identificada por error como una pieza de Sedefkar. Medio sorprendidos, medio defraudados, se marcharon del hospital.


 Después de esto el grupo tuvo que debatir su siguiente paso. Algunos personajes abogaban por volver rápidamente a Zagreb y continuar el viaje, mientras que otros defendían que no se podía pasar por alto las prácticas de Freygan y que debían tratar de detenerle. Al final optaron por intervenir (aunque uno de los jugadores cuyo pj arrastraba heridas de partidas anteriores opto por "manejar" un pnj) y se colaron en el hospital en mitad de la noche.
Encontraron a Freygan en su laboratorio secreto inyectando una sustancia viscosa sobre uno de sus pacientes. Al tratar de detenerlo la escena terminó en un combate y con Freygan quemado mientras parecia tratar de metamorfearse en una extraña criatura, informe y protoplasmatica. Uno de los pjs cayó herido de muerte bajo el garrote de uno de las celadores pero esta vez hubo suerte y la enfermera sacó la tirada de primeros auxilios. Pasaron todas las tiradas de cordura y ahora tienen además un porcentaje importante del documento conocido como los Manuscritos Pnakóticos.

En definitiva creo que una buena partida, con una pista falsa que le da credibilidad a la búsqueda.