miércoles, 25 de mayo de 2016

Investigadores en Londres nº7 y 8

La campaña sigue avanzando y con estas dos últimas sesiones, sumadas a las diez que nos costó completar el Horror en el Orient, ya llevamos una buena serie de aventuras a La Llamada. Recordemos que dejamos a nuestros queridos investigadores desembarcando en Alejandría, en busca de la desaparecida Expedición Byforf

(Como ya he comentado anteriormente estás últimas aventuras están basadas en los  módulos de El manuscrito Tolkien y La tumba de Eibón de libre descarga.)

PISTAS EN ALEJANDRIA Y EN EL CAIRO
Pocos minutos después de tocar puerto y mientras los personajes empezaban a ser conscientes de la situación convulsa del Egipto de los años 20 los personajes se toparon con serios problemas cuando un grupo de individuos intento asaltarles en plena calle. No había duda que algún tipo de secta trataba de ponerles las cosas difíciles pero la última localización conocida de los arqueólogos era la ciudad de El Cairo por lo que ese era el lugar donde debían comenzar a indagar.


Así que toda la sesión de juego se desarrollo en las calles de la gran capital de Egipto. Los jugadores descubrieron que Byforf había tenido tratos con un contrabandista de arte en el bazar de Hkan el Khalili y que, dejándose llevar por el consejo de un ladrón de tumbas, había decidido emprender la búsqueda de unas misteriosas ruinas en mitad del desierto. Los investigadores reunieron toda la información posible y tras descubrir una vieja tablilla en El Museo Egipcio creyeron conocer por fin el destino que había tratado de alcanzar la expedición perdida.

La misteriosa tablilla. Pudieron averiguar su significado gracias al alfabeto descifrado por Tolkien

Solo les quedó prepararse para internarse en el desierto así que contrataron al mejor guía beduino que pudieron encontrar y embarcaron en un pequeño vapor para remontar el Nilo.

LA TUMBA DE EIBON
La segunda sesión en Egipto fue todavía más peligrosa que la primera. Llegar hasta las primeras cataratas fue lo más sencillo pese a que los miembros de La Hermandad del Faraón Negro (así se llamaba la secta que trataba de liquidarlos) trataron de abordar, en plena noche, el vapor que habían contratado.

El Memmon. Entre hipopótamos y cocodrilos los pjs disfrutaron de un bonito crucero.

Después de la travesía fluvial llego lo peor. Aconsejados por su guía y acompañados por un grupo de valientes porteadores se aprovisionaron en Asuan de todo lo necesario, compraron provisiones, agua, buenos camellos y se metieron en el desierto en una travesía que al menos los tendría durante doce días entre las peligrosas arenas sin fin de Libia.

El desierto les deparó insolaciones, deshidratación y una agradable visita a un poblado beduino.  Cuando llegaron al último oasis que iban a encontrar en su camino se toparon, nada más y nada menos, que con un pequeño Chthonian que les obligó a emprender una emocionantísima huida en camello.


Al final todo valió la pena (dentro de lo que es La Llamada). Encontraron las ruinas y rescataron con vida a dos de los miembros de la expedición perdida. Increíblemente ninguno de los personajes murió (dos recibieron la tirada de primeros auxilios un extremis en una situación muy complicada) aunque si lo hicieron varios de los porteadores

Siento no extenderme mucho en el resumen pero no tengo mucho tiempo ahora. Creo que estas dos últimas sesiones fueron muy divertidas y con mucha más acción de los normal aprovechando el entorno "salvaje" en el que estábamos. (y que veníamos de un par de sesiones seguidas sin un solo combate)

martes, 3 de mayo de 2016

Investigadores en Londres nº6

Otra nueva sesión de juego está vez enlazada con la historia que quedó abierta tras jugar la adaptación de El Manuscrito Tolkien.

HACIA EL CAIRO
Cuando regresaron de Escocia, la joven arqueóloga Christine Rutheford se puso en contacto con los pjs para informarles que tras muchos esfuerzos, y gracias a la ayuda del filólogo Ronald Tolkien, por fin había conseguido traducir la tablilla que su prometido (miembro de una expedición arqueológica) le había enviado desde Egipto.
Más preocupante era además, el hecho de que hacía semanas que nadie tenía noticias de ningún miembro de dicha expedición por lo que el consejo de administración del Museo Británico (promotores de la excavación) estaban muy preocupados. Por si fuera poco todos tenían presente que recientemente Christine había sido secuestrada y casi asesinada por un individuo que provenía de Egipto con la presunta intención de evitar que la tablilla fuera descifrada.


Así que tras la reunión en El British los investigadores aceptaron encabezar una misión de búsqueda y rescate de la  Expedición Byforf, en paradero desconocido. Rápidamente recopilaron todós los datos posibles de los desaparecidos además de pedir una copia a Chrisitne de la traducción y del alfabeto que había descifrado junto a Tolkien. Dedujeron que era muy probable que tras el hallazgo de la tablilla en El Cairo, el profesor Byford hubiera decidido cambiar el destino planeado y en vez de dirigirse a EL valle de los Reyes  hubiera conducido a su grupo en busca de unas misteriosas ruinas en mitad del desierto (en donde en teoría un beduino había encontrado la tablilla)


 El resto de la partida  transcurrió a bordo del buque a vapor Saxonia que fue el medio de transporte que los pjs escogieron para viajar de Southampton hasta Alejandría, haciendo escala en Gibraltar. Después de jugar El Orient Express los jugadores tenían pocas ganas de volver a viajar en el lujoso tren dándose además la circunstancia que los miembros de la expedición Byforf habían usado este mismo buque para ir hasta Egipto un par de meses antes (¿podrían averiguar alguna pista importante durante la travesía?)

Detalle de los camarotes de primera clase

El viaje fue muy tranquilo hasta llegar frente a la costas de Túnez cuando, una mañana, una camarera descubrió a uno de los pasajeros de primera clase ahorcado en su camarote. Casi por instinto los jugadores se pusieron a indagar mientras se relacionaban con el resto de pasajeros que incluían a Wiston Churchill (joven ministro de hacienda en viaje oficial) y un noble ruso emparentado con la dinastía Romanov.  Sus descubriminetos pusieron de manifiesto que tras el suicidio realmente había un asesinato encubierto.

El pasaporte del muerto. Americano?

En definitiva, una partida de transición que nos ayudó a profundizar en los viajes marítimos de la época y sirve como introducción de la autentica aventura: la búsqueda de la expedición Byforf

(Tengo que reconocer que la aventura me quedo un poco corta esta vez)