Morglen: Enano clérigo de Gond

Durante la infancia y juventud de Morglen su familia vivió en varias pequeñas poblaciones de la Costa de la Espada pues el cabeza de familia trabajaba como artesano y herrero en las aldeas y pueblos (normalmente con población humana) que requerían de su servicio. Fue durante su infancia, al visitar una feria ambulante, cuando Morglen descubrió algo que llamaría profundamente su atención: un pequeño autómata animado. Al principio el joven enano pensó que esta extraña criatura sería algún tipo de creación mágica pero luego descubrió que se trataba de algo diferente, pero también maravilloso…algo llamado “tecnología” Desde entonces Morglen quedo cautivado por todo aquellos inventos e ingenios tecnológicos con los que se encontraba así que, cuando su familia decidió regresar con su clan de procedencia (en el Valle del Viento Helado), se unió a la iglesia de Gond. Ahora Morglen recorre el mundo en busca de artefactos, cachivaches, maquinas, mecanismos… cualquier cosa ingeniosa que encuentra es analizada para averiguar su principio de funcionamiento. Después toma anotaciones en los cuadernos que siempre lleva encima, dibuja sus piezas y recaba toda la información posible que entrega en los Templos de su deidad. Su misión es distribuir estos conocimientos por todo el continente. Uno de sus mayores tesoros es un “extraño reloj” que guarda entre sus pertenencias. Este reloj no mide el tiempo como el resto de relojes (usando arena o la posición del sol) sino que es una pequeña carcasa metálica llena de engranajes y que tiene una esfera de cristal donde unas finas agujas metálicas marcan el paso de las horas. Este objeto es el foco que el enano usa en sus oraciones. Morglen tiene además una misión secreta que no compartirá con nadie ajeno a su religión. Ha llegado a oídos de la la iglesia de Gond que existe un extraño polvo alquímico con el que se pueden fabricar armas capaces de lanzar proyectiles a larga distancia. Nadie parece saber si es cierto que existe esta enigmático polvo (que algunos llaman “pólvora”) pero muchos clérigos de Gond han sido puestos sobre aviso pues también se dice que los lanzadores de conjuros quieren que la formula de este polvo nunca salga a la luz, pues estas armas podrían competir con los poderes arcanos de los hechiceros. Es en el extraño polvo en lo que el enano pensaba cuando, la noche después de la destrucción del Golem, se coló en secreto en la mansión del noble de Aguasfuertes. Le había apenado destruir al Golem pero lo realmente importante todavía estaba en la mansión… ¡una maquina que funcionaba con la energía de los rayos y que había podido revivir una criatura muerta!...había mucho que anotar y muchos planos que dibujar.